Confesión: "Mi ciento por uno "

“Padre, Tu Palabra dice que Aquel que ministra la semilla al sembrador ministra tanto pan para mi comida y multiplica mi semilla sembrada e incrementa los frutos de mi justicia.  Por lo tanto, estoy enriquecido en todo abundantemente, lo cual provoca a través nuestro acción de gracias a Dios.  Te agradezco, Señor.

“En el nombre de Jesús, recibo ahora por fe el retorno del ciento por uno de esta semilla que está en mi mano.  Lo hago en obediencia a la Palabra.

“Y, Satanás, en el Nombre de Jesús, te reprendo.  Tu estás persiguiendo mi semilla.  ¡Quita tus manos de mi dinero!  Esta no es tu semilla.  No es tu tierra.  Es mía y de Dios.  ¡Sal de mi jardín!  ¡Sal de mi campo, porque la cosecha es mía!

“Señor Jesús planto esta semilla en este ministerio y creo en su retorno porque Tu lo dijiste.  La dedico a Tu servicio, para Tus asuntos, en el Nombre de Jesús.  Será como los panes y los peces cuando usaste el principio del ciento por uno para alimentar a la gente.  ¡Amén!”

Referencias en la Confesión:  2ª Corintios 9:10-11; Marcos 4, 6:33-44; 10:29-30

Cuando usted siembre, crea una cosecha al ciento por uno.  Usted será una bendición a otros y estar fuera de la deuda.  Dios lo bendecirá y “para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que teniendo siempre en todas las cosas todo lo necesario, abundéis para toda buena obra” (2ª Co. 9:8).

 

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