INICIO CONOZCANOS MULTIMEDIOS ESTUDIOS RADIO Y TV LIDERAZGO HOGAR DE NIÑOS CONTACTO
Semana Santa

Semana Santa comienza con la Pascua


La intención de Dios es que esta celebración de las Pascuas sea recordada y tenga lugar dentro del cuerpo de Cristo. Que se celebre para siempre.

“Y este día os será en memoria, y lo celebraréis como fiesta solemne para Jehová durante vuestras generaciones; por estatuto perpetuo lo celebraréis”.
Éxodo 12:14

Estamos en un año declarado proféticamente como un año de Favor y Gracia de parte de Dios. Estos son días establecidos por Dios para que:

• Muchas vidas cambien
• El Poder milagroso de Dios se mueva
• Muchos queden asombrados por ver lo que Dios ha hecho en sus vidas

En este tiempo Dios será glorificado a través suyo. Es en la oración, en la intimidad con Dios en donde será cubierto con Su presencia y en donde entrará a un nuevo nivel de Gloria. Él tiene planes extraordinarios con usted, ellos son más de los que pueda imaginar. Todo lo que Dios hace está de acuerdo a Su diseño, porque Él tiene un diseño estratégico para permanecer con usted. En su vida desbordarán bendiciones espirituales, materiales y emocionales. La vida abundante que Dios tiene para usted lo glorifica a Él y también a través suyo esa vida abundante se manifestará sobre otros.

La historia de Éxodo fue anticipada por Dios. “Entonces Jehová dijo a Abram: Ten por cierto que tu descendencia morará en tierra ajena, y será esclava allí, y será oprimida cuatrocientos años. Mas también a la nación a la cual servirán, juzgaré yo; y después de esto saldrán con gran riqueza. Y tú vendrás a tus padres en paz, y serás sepultado en buena vejez. Y en la cuarta generación volverán acá; porque aún no ha llegado a su colmo la maldad del amorreo hasta aquí. Y sucedió que puesto el sol, y ya oscurecido, se veía un horno humeando, y una antorcha de fuego que pasaba por entre los animales divididos. En aquel día hizo Jehová un pacto con Abram, diciendo: A tu descendencia daré esta tierra, desde el río de Egipto hasta el río grande, el río Éufrates […]”. Génesis 15:13-18. Acá Dios promete a Abraham una Gran liberación a su descendencia. Y hoy nosotros somos hijos de Abraham, descendientes del Padre de la Fe. “Sabed, por tanto, que los que son de fe, éstos son hijos de Abraham”. Gálatas 3:7  

La primera fiesta del Señor es la Pascua. El calendario bíblico es diferente al que actualmente usamos nosotros, por eso las fiestas caen en días diferentes cada año. Sin embargo, podemos ver que los eventos de la Pascua están escritos en el libro de Éxodo en el capítulo 12. El tema central de este libro es sobre como Dios liberó a su gente de Egipto. La palabra Éxodo significa: salir fuera. Esto fue hecho a través de la Pascua. Luego de cientos de años de esclavitud el pueblo de Egipto fue libre, fue redimido para ser una Nación nacida de nuevo. Una Nación que le pertenece a Dios porque la Sangre del cordero de la Pascua los redimió y los protegió de la destrucción. La sangre del cordero protegió de la muerte a sus hijos y ningún enemigo podía cruzar la línea de sangre que los rodeaba. “Y la sangre os será por señal en las casas donde vosotros estéis; y veré la sangre y pasaré de vosotros, y no habrá en vosotros plaga de mortandad cuando hiera la tierra de Egipto”. Éxodo 12:13

Pascua es protección divina sobrenatural. Usted y yo somos salvos por la Sangre de Jesús. Hoy, la Sangre de Jesús (El Cordero de Dios) nos cubre, nos guarda y nos redime a cada uno de nosotros. Dios hizo que los enemigos del pueblo de Dios llenen sus manos con oro y plata al momento de ser liberados. Recuerde: Él prometió que sus manos nunca más estarían vacías. Su obediencia a Dios, es una semilla que produce cosecha al ciento por uno. En el nuevo testamento el Pacto es perfeccionado en Cristo. La Pascua es un tipo y sombra de Jesucristo. También es una fiesta, celebrando la liberación del pueblo de Dios de la esclavitud.

La Pascua nos ilumina con verdades y bendiciones sobrenaturales. Cuando aceptamos a Jesús en el corazón, nuestra relación y conexión con el Padre es restaurada, gracias a la poderosa sangre de Jesús. Hay un pacto de sangre del ser humano con Dios y también hay grandes beneficios para usted por la Sangre de Jesús. Todo lo que Dios hace está ideado para que salga bien, porque Él planeó cosas buenas para su vida. La Pascua no solo representa el festejo de una liberación, sino que también representa la libertad concedida por medio de la Sangre de Jesús y de Su obra redentora en la cruz del Calvario.

¡Prepárese para tomar de las bendiciones que Dios le ha concedido por medio de Su sangre, hoy es un tiempo de celebración, Jesús es nuestra Pascua!

 

Ap. Juan Crudo